Aunque fue rechazado luego de su aparición pública, el informe sobre derechos humanos del Departamento de Estado de los Estados Unidos consigna el caso de la documentalista chilena, Elena Varela López.
El texto establece que la realizadora fue detenida el 7 de mayo de 2008, acusada por el delito de asociación ilícita para delinquir, por lo cual le fue confiscado todo su equipo de trabajo y documentos de investigación relacionados con el conflicto entre empresas madereras y el pueblo mapuche.
Varela ha pasado los últimos días preparando su defensa, que encabeza el juez Juan Guzmán Tapia, para el juicio oral que comienza el próximo miércoles 17 de marzo, y donde la fiscalía pidió quince años un y día de presidio por encubrimiento.
“Hay papeles que se están buscando, por aquí y por allá, además de trámites y peritajes. Estoy dedicada a este tema y un poco desilusionada de todo y preocupada, ha sido súper negativo que la fiscalía no haya reconocido su error en todo este proceso”, señaló la documentalista.
El caso por el cual está procesada se relaciona con dos asaltos perpetrados por ex militantes del MIR en 2004 y 2005, de los cuales Elena Varela habría conocido a uno ellos, razón por la cual la policía la involucró en el caso.
Por eso, la defensa que prepara el juez Guzmán busca desvirtuar los argumentos presentados por la fiscalía, ya que no por conocer a una persona determinada, se le puede vincular directamente a un delito.
"Uno en su vida puede involucrarse con personas y eso no te hace ser parte de un asalto. Lo que él (Guzmán) quiere demostrar es que alrededor de esto hay otros intereses”, expresó. Durante el allanamiento y detención ocurrida en su casa de Villarrica, se le confiscó todo su material fílmico y otros documentos relacionados a la investigación del documental “Newen Mapuche”, trabajo quizá nunca pueda ver la luz, ya que aún está en manos de la policía.
Guzmán Tapia indicó que todo apunta a que la detención de Varela tiene un trasfondo y que es conocer la identidad de una serie de personas vinculadas con las demandas del pueblo mapuche. “Podría pensarse que la policía ha querido ver eso para saber cuáles son las personas que ellos buscan, y así obtener los resultados en sus investigaciones. Pero no quiero pensar tan mal. De lo demás, no hay pruebas suficientemente fuertes que llevaran a considerar que ella fuera responsable de ninguno de los hechos”, afirmó.
Aunque el fiscal aseguró en su momento que la acusación sería por delitos menores, ahora está pidiendo quince años y un día de cárcel contra la documentalista, pero el juez Guzmán expresó su confianza en lograr su absolución.
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